Ruta comprendida entre la carretera de Belchite (A-222), cruzando la N-232 de Castellón, y enlazando su prolongación en línea recta con el camino Cordel de Aladrén para llegar hasta el río Ebro.
Se toma la rotonda de la carretera N-232 que da acceso a la carretera de Belchite A-222, y justo a unos 650 metros una vez cogida ésta última carretera, encontramos una casona abandonada.
A unos 100 metros de la finca abandonada andando paralelamente a la carretera, encontramos el primer bunker de planta rectangular.
A otros 100 metros del primero en la ladera de una loma, otro bunker mucho más pequeño, de planta circular.
Remontando la loma, se divisa una entrada es el acceso trasero de una fortificación que cruza el interior del monte a través de galerías excavadas, algunas de las cuales estaban reforzadas con hormigón.
Al otro lado de la N-232, junto a las vías del tren y debajo de la rotonda, un bunker semienterrado, que construido por «Los Barbis».
Fortín tradicional de tipo pelotón con forma rectangular y dos anexos circulares (nidos de ametralladora), y dos entradas. En las dos entradas se inscribe «Los Barbis», que fueron los responsables de su construcción. Se halla al lado de la vía de ferrocarril, a escaso metro y medio y actualmente se halla pegado al acceso a una rotonda que se ha realizado en la nueva variante de la N-232 , por lo que su acceso es muy complicado, además de peligroso, pues para verlo hay que pasar las vías del tren. Asimismo, parte del vestigio se halla pegado a un muro que se ha levantado para efectuar el acceso a una rotonda y por lo tanto no se puede ver en su conjunto.
Avanzando con el coche paralelamente al la carretera que hace de enlace entre la N-II/AP-2/N-232, y en medio de un campo de trigo, enfrente de la fábrica de papel se encuentran dos bunkers, de unos 3 metros de alto y 5 metros de diámetro.
La trinchera de San Jorge, situada en el monte, en el cabezo detrás del cementerio, más en el interior.