Situada en el cementerio de Esplús, ha desaparecido bajo dos bloques de nichos colindantes que fueron construidos en los años cuarenta y setenta, respectivamente.
Contenía los restos de una cantidad indeterminada de personas asesinadas en ese lugar por los sublevados después de que éstos conquistasen la zona en la primavera de 1938.
El enterrador de la época, aseguraba haber cavado alrededor de una treintena de tumbas. Hoy en día ya no se recuerda con certeza la identidad de todas las víctimas, aunque diez de ellas sí que han podido ser identificadas. Todas murieron entre el 5 y el 19 de abril de 1938.
En una de las columnas del bloque de nichos hay unas pequeñas placas que recuerdan a algunos de esos fallecidos.
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