Diversos testimonios indican que entre tres y seis guerrilleros del maquis fueron fusilados por la Guardia Civil en el cementerio de La Puebla y enterrados en un rincón del camposanto. Con el tiempo sus cuerpos fueron exhumados a fin de dejar paso a la construcción de un pequeño grupo de nichos.

Puede ser que  fueran recuperados por unos familiares llegados desde Asturias, o que fueron enterrados junto a la caseta del cementerio en la que en actualidad se guardan las herramientas.

Fuente: Mapa de Fosas de Aragón